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REALIZAN ASAMBLEAS CONSULTIVAS EN BATOPILAS Y GUACHOCHI PARA LEY DE DERECHO A LA CONSULTA DE LOS PUEBLOS INDÍGENAS ​​​

– Participan más de 200 integrantes de 21 comunidades; destaca “su profundo deseo de ser escuchados, que se les note y no se les use políticamente”

El Gobierno del Estado, a través de la Comisión Estatal para los Pueblos Indígenas (COEPI) realizó asambleas indígenas consultivas en comunidades rarámuri de los municipios de Batopilas y Guachochi, para recopilar propuestas de los habitantes de la zona que serán integradas en la iniciativa de reforma constitucional en materia del derecho a la consulta.

En Batopilas se acudió a las comunidades de San Ignacio y Munérachi, mientras que en Guachochi la visita fue al poblado de Samachique.

Acudieron más de 200 personas, contando con la presencia de 19 autoridades indígenas (isélikami), de comunidades como La Gavilana, San José, Huisuchi, Coyachique, Munérachi, San Ignacio, Las Cañas, Las Juntas de Santa Inés, El Rodeo, La Tulita, Guadalupe Viejo, Potrero Castillo, Palmarito, El Salvial, Las Higueras, Las Torrejas, Pamachi, Samachike, Guagueibo, Kirare, Bakuséachi, Basigochi y Guaguachique.

El equipo de la Comisión Estatal para Pueblos Indígenas, liderado por el antropólogo Víctor Martínez Juárez, presentó material didáctico en ambas lenguas (castellano y rarámuri) para explicar el tema de los derechos de los pueblos originarios, haciendo énfasis en tres de ellos: libre determinación, autonomía y derecho a la consulta.

Las autoridades representantes de las diversas comunidades apoyaron a los representantes de la COEPI con la labor de divulgación. Llamaron a los y las asistentes a permanecer unidos y a comprometerse con este nuevo proceso, a opinar e involucrarse de forma activa y a invitar al mayor número de personas posibles para que se sumen, lleguen a un consenso y propongan cómo consideran ellos que tendría que ser esta nueva ley.

Dentro de las solicitudes hechas por los pobladores, destacaron su profundo deseo de ser escuchados, de que se les note y no se les use políticamente; sobre todo, que la gente que acude a la comunidad no llegue a imponer sino a construir y trabajar en conjunto, tal como señalaron.